Poemas para todo el mundo
Los chicos de 1º grado hicieron un cancionero con los trabajos que realizaron durante el año.
¡¡Qué lindos!!
Los chicos de 2º y 3º grado leen poesías y preparan los susurradores.
Los nenes de segundo grado junto con las Señoritas Norma, Alexandra y Lorena, leyeron poesías y grabaron sus voces para el encuentro del 8 de noviembre en la Plaza Irala.
Los chicos de tercero, crearon sus propias poesías en Biblioteca. Con el Prof. de Plástica, Horacio, decoraron sus susurradores.
Una de las poesías que leyeron los chicos de 2º |
Los susurradores son tubos de cartón que sirven para transmitir poesías o coplas que se recitan al oído.
Un tubo de cartón, dos personas y un poema.
Los elementos necesarios para trasportarse a lugares soñados, sin moverse del lugar.
Esa es la función de los susurradores de poemas, que susurran piezas literarias al oído de las personas por medio del “susurrador”.
4º grado también leyó poesías...de amorrrr
Amor en la biblioteca
de una vieja biblioteca.
Su casa era un cuento de hadas,
que casi nadie leía,
estaba entre un diccionario
y un libro de poesías.
Solamente algunos chicos
acariciaban sus páginas
y visitaban a veces
su palacio de palabras.
Desde la torre más alta,
suspiraba la princesa.
Lágrimas de tinta negra
deletreaban su tristeza.
Es que ella estaba aburrida
de vivir la misma historia
que de tanto repetir
se sabía de memoria:
una bruja la hechizaba
por envidiar su belleza
y el prícincipe la salvaba
para casarse con ella.
Cuentan que cuentan que un día,
justo en el último estante,
alguien encontró otro libro
que no había visto antes.
Al abrir con suavidad,
sus hojas amarillentas
salió un capitán pirata
que estaba en esa novela.
Asomada entre las páginas
la princesa lo miraba.
Él dibujó un sonrisa
sólo para saludarla.
Y tarareó la canción
que el mar le canta a la luna
y le regaló un collar
hecho de algas y espuma.
Sentado sobre un renglón,
el pirata, cada noche,
la esperaba en una esquina
del capítulo catorce.
Y la princesa subía
una escalera de sílabas
para encontrar al pirata
en la última repisa.
Así se quedaban juntos
hasta que salía el sol,
oyendo el murmullo tibio
del mar, en un caracol.
Cuentan que cuentan que en mayo
los dos se fueron un día
y dejaron en sus libros
varias páginas vacías.
Los personajes del libro
ofendidos protestaban:
"Las princesas de los cuentos
no se van con los piratas".
Pero ellos ya estaban lejos,
muy lejos, en alta mar
y escribían otra historia
conjugando el verbo amar.
El pirata y la princesa
aferrada al brazo de él
navegan por siete mares
en un barco de papel.
que casi nadie leía,
estaba entre un diccionario
y un libro de poesías.
Solamente algunos chicos
acariciaban sus páginas
y visitaban a veces
su palacio de palabras.
Desde la torre más alta,
suspiraba la princesa.
Lágrimas de tinta negra
deletreaban su tristeza.
Es que ella estaba aburrida
de vivir la misma historia
que de tanto repetir
se sabía de memoria:
una bruja la hechizaba
por envidiar su belleza
y el prícincipe la salvaba
para casarse con ella.
Cuentan que cuentan que un día,
justo en el último estante,
alguien encontró otro libro
que no había visto antes.
Al abrir con suavidad,
sus hojas amarillentas
salió un capitán pirata
que estaba en esa novela.
Asomada entre las páginas
la princesa lo miraba.
Él dibujó un sonrisa
sólo para saludarla.
Y tarareó la canción
que el mar le canta a la luna
y le regaló un collar
hecho de algas y espuma.
Sentado sobre un renglón,
el pirata, cada noche,
la esperaba en una esquina
del capítulo catorce.
Y la princesa subía
una escalera de sílabas
para encontrar al pirata
en la última repisa.
Así se quedaban juntos
hasta que salía el sol,
oyendo el murmullo tibio
del mar, en un caracol.
Cuentan que cuentan que en mayo
los dos se fueron un día
y dejaron en sus libros
varias páginas vacías.
Los personajes del libro
ofendidos protestaban:
"Las princesas de los cuentos
no se van con los piratas".
Pero ellos ya estaban lejos,
muy lejos, en alta mar
y escribían otra historia
conjugando el verbo amar.
El pirata y la princesa
aferrada al brazo de él
navegan por siete mares
en un barco de papel.
Los chicos de 5º se metieron en el mundo del tango y del lunfardo y se transportaron a la época de las grandes inmigraciones europeas...
Te
perdiste a la milonguera
un
arrastre sin igual
cuando
los hombres
me
ven milonguear.
A las
minolas,
las
dejo quemar
con mis pilchas
con mi carita de mar.
con mis pilchas
con mi carita de mar.
A los atorrantes,
los hago bailar
si
vos te amuras
yo te hago cantar.
Todos
me campanean de araca
cuando
me ven pasar
y yo
sólo amarroco su corazón,
porque
mi filo me engrupió.
¡Me
embadurnaste cabrón
y te
perdiste a este bombón!
6º grado ¡¡Escribió su propio libro!!
Además de leer y escribir poesías, los chicos más grandes indagaron sobre los caligramas y los graffitis.
Leyeron poemas de escritoras argentinas y letras de canciones, por ejemplo de Luis Alberto Spinetta
Por
Arbol
Hoja
Salto
Luz
Aproximacion
Mueble
Lana
Gusto
Pie
Te
Mar
Gas
Mirada
Nube
Loba
Dedo
Cal
Gesticulador
Hijo
Cama
Menta
Sien
Rey
Fin
Sol
Amigo
Cruz
Alga
Dado
Cielo
Riel
Estalactita
Mirador
Corazon
Hombre
Rayo
Felpa
Sed
Extremidad
Insolacion
Parecer
Clavo
Coito
Dios
Temor
Mujer
Por
Arbol
Hoja
Salto
Luz
Aproximacion
Mueble
Lana
Gusto
Pie
Te
Mar
Gas
Mirada
Nube
Loba
Dedo
Cal
Gesticulador
Hijo
Cama
Menta
Sien
Rey
Fin
Sol
Amigo
Cruz
Alga
Dado
Cielo
Riel
Estalactita
Mirador
Corazon
Hombre
Rayo
Felpa
Sed
Extremidad
Insolacion
Parecer
Clavo
Coito
Dios
Temor
Mujer
Por
Luis Alberto Spinetta
Y para finalizar, les contamos que los chicos de 7º leyeron poemas de autores argentinos, algunos de origen gauchesco y otros de la literatura universal.
Se emocionaron con Alfonsina Storni, Alejandra Pizarnik y buscaron información no sólo de poesía sino también de cuentos de Jorge Luis Borges, Haroldo Conti y Rodolfo Walsh...
LA JAULA (A. Pizarnik)
Afuera hay sol.
No es más que un sol
pero los hombres lo miran
y después cantan.
Yo no sé del sol.
Yo sé la melodía del ángel
y el sermón caliente
del último viento.
Sé gritar hasta el alba
cuando la muerte se posa desnuda
en mi sombra.
Yo lloro debajo de mi nombre.
Yo agito pañuelos en la noche y barcos sedientos de realidad
bailan conmigo.
Yo oculto clavos
para escarnecer a mis sueños enfermos.
Afuera hay sol.
Yo me visto de cenizas.
1 comentario:
BRILLANTEEEEEE
Publicar un comentario